Autor: Haruki Murakami
Año de publicación: 2011
Número de páginas: 744
Temática: Narrativa contemporánea
Mi puntuación: 8/10
Sinopsis: En japonés, la letra q y el número 9 son homófonos, los dos se pronuncian kyu, de manera que 1Q84 es, sin serlo, 1984, una fecha de ecos orwellianos. Esa variación en la grafía refleja la sutil alteración del mundo en que habitan los personajes de la novela, que es, también sin serlo, el Japón de 1984. En ese mundo en apariencia normal y reconocible se mueven Aomame, una mujer independiente, instructora de un gimnasio, y Tengo, un profesor de matemáticas. Ambos rondan los treinta años, ambos llevan vidas solitarias y ambos perciben a su modo leves desajustes en su entorno, que los conducirán de manera inexorable a un destino común. Y ambos son más de lo que parecen: la bella Aomame es una asesina; el anodino Tengo, un aspirante a novelista al que su editor ha encargado un trabajo con La crisálida del aire, una enigmática obra dictada por una esquiva adolescente. Y, como telón de fondo de la historia, el universo de las sectas religiosas, el maltrato y la corrupción, un universo enrarecido que el narrador escaba con precisión orwelliana.
Mi crítica:
Es el primer libro que leí de Murakami y el resultado ha sido bastante bueno. A pesar de que a mi no me suelen gustar los libros muy fantasiosos o que no se corresponden con la realidad, éste si ha sabido atraparme.
En un principio no me gustaba Tengo, me parecía un personaje muy simple y apático, sin ninguna emoción pero a medida que iba avanzando el libro me ha ido gustando cada vez más y he descubierto que debajo de toda esa fachada apática había mucho más personaje y carácter.
Aomame para mi es perfecta, me encanta, y me recuerda mucho a Lisbeth Salander, la protagonista de Los hombres que no amaban a las mujeres, de hecho, físicamente me la imaginaba así, es una mujer con mucho carácter, de armas tomar y que no se deja asustar por nada ni por nadie, muy rara eso sí, pero se le coge cariño y a veces incluso, la pude llegar a entender porque hacía una cosa u otra.
La manera de escribir de Murakami me gustó, en mi opinión te mete muy bien en la historia y te sabe llevar para que no pierdas el interés en seguir leyendo, además hace unas descripciones magníficas, bajo mi punto de vista, parece como si lo estuvieses viendo de verdad.
El final te deja con ganas de coger el tercer libro inmediatamente, de hecho, yo lo hice, cosa muy rara en mi ya que normalmente suelo leer otros libros de otras temáticas entre medias para no saturarme.
Lo recomiendo a todo aquel al que le guste la literatura un poco fantasiosa o que se aleje de la realidad, y al que no, yo tampoco lo catalogaría en el género de fantasía, asi que puede probar que igual se lleva una sorpresa, como yo, eso sí, que no intente buscarle la lógica porque las cosas que pasan en éste libro sólo tienen lógica en el mundo de Murakami.
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